pobreza

pobreza.
	(De pobre).
	1. f. Cualidad de pobre.
	2. f. Falta, escasez.
	3. f. Dejación voluntaria de todo lo que se posee, y de todo lo que el amor propio puede juzgar necesario, de la cual hacen voto público los religiosos el día de su profesión.
	4. f. Escaso haber de la gente pobre.
	5. f. Falta de magnanimidad, de gallardía, de nobleza del ánimo.

Ser pobre, hoy día, es muy fácil. Basta con haber nacido fuera de EEUU, Canadá, o la Europa Occidental. O no... porque incluso habiendo nacido en esos países ricos, tienes un 20% de posibilidades de nacer pobre o terminar siéndolo.

Y no tenéis que buscar a los pobres tirados en la calle, hambrientos, pidiendo limosna como si les fuera la vida en unos pocos centavos que les pudiérais dar... Buscadlos en vuestro trabajo, entre vuestras amistades, en la familia. Hay pobres por todos lados. Puede que vayan bien vestidos, que tengan vehículo propio, un lugar donde dormir... pero no os engañéis, porque el día 10 de cada mes ya no tiene dinero para comprar algo que echarse a la boca. Son los pobres silenciosos.


Como si no fuera suficiente con pagarles una miseria por trabajar 12 horas al día, tener que pagar un alquiler a un precio humillante por un pisito de mala muerte, y hacer frente al redondeo del Euro... encima tienen que pagar el IRPF, descontado de su nómina, cuando está cobrando menos que el mínimo necesario para poder hacer la Declaración de la Renta. Es decir, encima, Hacienda le quita dinero de su sueldo miserable.

Algo falla aquí... Cuando Hacienda recauda impuestos de un rico, se llama recaudación de impuestos. Pero cuando lo hace a un pobre... ¿cómo llamamos a eso? Yo lo llamaría asesinato en primer grado.

AXPE: El año que trafiqué con trabajadores

¿Qué es un trabajador? Un trabajador es carne fresca, mercancía barata con la que trafican las llamadas Consultoras de Recursos Humanos, entre las cuales tenemos a AXPE Consulting. Todas las Consultoras de RRHH (de ahora en adelante: traficantes) son lo mismo. Es decir, ganan dinero gracias al sudor de tu frente, a ellos les pagan para que tú trabajes, tal y como se hacía antiguamente con los esclavos africanos. Pero AXPE es especialmente delincuente.


La historia es la siguiente: Tenemos a AXPE y a David Lozano Lucas. Por un lado a una empresa que explota a los trabajadores, y por otro lado a un héroe de los trabajadores que osó a escribir en un blog las vejaciones a las que fue sometido por parte de AXPE. Desenlace: AXPE ha denunciado a Lozano. Veremos a ver cómo termina la historia, pero de momento el que va perdiendo es nuestro héroe Lozano, por los gastos económicos que le debe ocasionar, además de la carga psicológica que debe ser el haber sido denunciado por una multinacional. Desde aquí todo mi apoyo en su lucha, que desde este momento hago también mía.


Gracias a Lozano han surgido cientos de voces de otros trabajadores, de AXPE o empresas similares, que han sido tratados también como mercancía. Puedes escucharlas en los comentarios. La mecha ya está encendida.


Nosotros, los trabajadores, no podemos quedarnos con los brazos cruzados. La lucha de Lozano debe ser también nuestra lucha, porque si Lozano pierde, habremos perdido todos, sin excepción. Nostros tenemos (o tendremos) hijos, a los cuales tenemos que mantener hoy y mañana, y quienes el día de mañana tendrán que enfrentarse al mundo. ¿Nos perdonarán por no haber hecho aboslutamente nada? ¿Podremos vivir en paz viendo cómo nuestros hijos se han convertido en auténticos esclavos del siglo XXI?


Los trabajadores rechazamos la violencia. Pero cuando nos atacan, debemos defendernos. La autodefensa es un derecho, no un delito. Que no nos dé miedo empuñar un palo cuando nos ataquen. Cogedlo con firmeza y con la convicción de que no hay más salida que seguir hacia delante, porque sólo se puede morir dignamente si se muere de pie. Que se arrodillen ellos. Los trabajadores nos levantaremos en armas cada vez que se nos ataque. Así debe ser. Así será.